EL AMANTE DEL MINISTRO

                                                                    227 ENTREGA

                                                                Crispulo Pallero Diaz



Estoy convencido de la sencillez del ser humano, aunque hagamos un esfuerzo descomunal todos los días por apartarnos del camino recto, que siempre es el más corto. No hablo únicamente de la apreciación moral, aunque podría y debería hacerlo. A lo que en este momento me refiero es a que la línea recta es en todo instante el trecho más corto, aunque apenas lo tomemos, por desgracia. Somos así.
Si algo he aprendido con el paso de los años es que el amor no tiene límites. No los tiene. Se multiplica como el agua en la mar, como la sal en los océanos, como el aire con el viento, como las estrellas en el cielo de verano. Lo bueno es infinito, y podemos tomar, como ocurre con lo nefasto, tanto como queramos. La opción es nuestra.
Hemos de añadir que somos animales de costumbres. Lo somos en el doble sentido, porque a menudo no pensamos en cuanto hacemos y porque nos dominan los hábitos, que nos cuesta adquirir y mucho más abandonar, sobre todo cuando los usos nos vienen por atajos poco beneficiosos.
Por ello hemos de potenciar desde infantes el mejor propósito, procurando un progreso compartido, extensivo, cierto, genuino por realizable. Las frustraciones vienen cuando no somos capaces de aprender a gestar amor, cuando no sabemos proyectarlo y vivirlo con esmero, dando y dando hasta los territorios desconocidos, sabiendo que la ola crece tan alta como seamos capaces de alzarla. Efectivamente, cuando no somos capaces de entregarnos en cariño vienen crisis de afectos, de credibilidad en nosotros mismos, de fortaleza interior, y todo lo demás, por construido que esté, se desmorona.
Decía San Agustín que el amor comienza por uno mismo. Es verdad, y no desde una óptica egoísta, sino de cimentación de los criterios de una auténtica democracia que nos puede transportar al porvenir verdadero. El sentimiento es nuestro combustible, el verdadero impulsor de cuanto nos toca vivir.
¡Cuántas cosas no ocurrirían si hubiera más amor! Desde luego las malas no se sucederían en este camino exponencial de dolor y de pesar al que nos llevan las guerras, el hambre, las enfermedades evitables, las desigualdades en el trato de cuestiones que consideramos esenciales como el derecho a la salud, a la educación, a la dignidad... El conflicto, la ausencia de paz, sea ésta concebida de manera menesterosa, es una consecuencia de una insuficiente justicia. La equidad en las oportunidades se tercia básica en este sentido y en muchos otros.
Dispongamos, pues, remesas de amor, de actividades positivas y en apoyo a los vecinos, a quienes nos rodean, que han de averiguar que las posibilidades son comunes y que los beneficios, en estos fundamentos a los que aludimos, también han de serlo. Los territorios compartidos deben ser escenarios de dicha y de apuesta por las generaciones futuras, por las que siempre hemos de esforzarnos sin librar batallas que se hallen carentes de dirección.
El amor es nuestra baza (en el recorrido vital, la básica). Sin él no podemos pensar que la existencia funcione. Si no “empatizamos” mimosamente con los que han perdido su casa, su trabajo, sus familias, sus plataformas, sus recursos materiales y hasta espirituales, si no conectamos y comunicamos con los infelices, de nada nos sirve todo lo que hayamos conseguido en el global. Si nos falta caridad, que es una interpretación del amor, nada tenemos como sociedad.
Recordemos que hemos vivido en una cierta, quizá excesiva, precipitación. En el momento del reposo cotidiano es importante que pensemos en todos y cada uno de los miembros de una comunidad, pero, fundamentalmente, en los que se han quedado atrás. La carrera tiene sentido con todos, y no con unos pocos. La fortuna es, a menudo, caprichosa, y no siempre da con el talento.
Por todo ello, creo que el deber de este verano que nos debemos auto-imponer, dentro de los propósitos de mejora, es plantar grandes campos, grandes extensiones, de amor en forma de hechos constantes y desarrollados cada día, que seguro que nos irán dando frutos muy interesantes, cargados de beneficios sociales. Hagamos una apuesta no escrita, pero que cumplamos, y universalicemos todos nuestros actos e iniciativas desde el cariño. Ya verán como nos va mejor. Seguro.

Los dos echados sobre la cama ,así nos sorprendió la noche como cual ladrón acecha  a su victima buscando el momento idóneo para poder saltar sobre ella y así poder arrebatar  y hacerse con el deseado botín así cayo la noche sobre nosotros ,la luna comenzaba a brillar entre los encinares se intentaba ocultar para no ser descubierta pero era tal su reflejo de vida que imposible no poder fijarse en ella .
En la habitación el reflejo de la llama que desprendía la chimenea iluminaba con una luz cálida a la vez que tenue ,el reflejo también invadía nuestros cuerpos desnudos dándoles ese reflejo fantasmagórico y sensual a la misma vez daba al momento unos aires de erotismo  haciendo recordar otras épocas vividas en la vieja casa de la dehesa.Poco después levantándome para comenzar a ducharnos y mirar que es lo que al final nos pondríamos para bajar a la cena de esa misma noche  ,la cena de Nochebuena.
Tras buscar algún disco  que poner para escuchar mientras nos duchábamos,encontré un CD que habíamos comprado en una casa de discos en Madrid que pertenecía a un amigo de Alberto ,y tras ponerlo en marcha me dispuse a entrar en la ducha ,sin hacer caso en esta ocasión a Jose Luis que aun tenia ganas de mas juegos ,y seguro estaba que en cuanto nos descuidáramos estaría Carlos llamando a al puerta para que bajásemos,por lo tanto antes que eso sucediera ,decidí hacer oídos sordos a la petición de Jose Luis y me adentre en la ducha como si con ese gesto pudiera hacer que el desistiera de sus pretensiones de seguir con el juego de ser conquistado nuevamente .


       
Estando bajo el agua la música comenzó a invadirlo todo llenando todos los rincones de maravillosas melodías las cuales invitaban a seguir con el juego que aun sin querer yo mismo estaba creando el ambiente para seguir alrededor del mismo sin poder evitarlo ,ay estaba yo bajo la ducha ,el agua recorría todo mi cuerpo la misma golpeaba sobre el suelo siguiendo el paso de la melodía que la música llevaba y traía según según la dirección de la caída del agua,estando bajo la misma apareció Jose Luis y tras llenarse las manos de gel comenzó a recorrer mi cuerpo enjabonando entero ,,luego cogiendo la alcachofa de la ducha se dispuso a enjuagarme hasta desprender de mi toda esa espuma que cubría mi cuerpo ,una vez que el había terminado yo comencé a enjabonar el suyo dando un suave masaje por el mismo ,mis manos recorrían su pecho ,abdomen,glúteos y sexo ,mis manos recorrían sus velludas piernas al mismo tiempo que mi cuerpo rozaba el suyo  despertando en mi el deseo de poder poseerle  nuevamente siendo aceptado en todo momento ,sin barreras ,temores y mucho menos pudores en esa tarde paso lo que irremediablemente tenia que pasar una vez que salimos de la misma nos secamos el uno al otro y adentrándonos nuevamente en la habitación comenzamos a vestirnos para así disponernos a bajar donde nos esperaban como siempre Alberto y Carlos que ya los habíamos sentido bajar hacia un buen rato ,yo le ayude a abotonar la camisa y el me coloco los gemelos en la mía ya que aunque estábamos en la casa y no saldríamos de ella ,los dos optamos por llevar puesto un pantalón fino con camisa abotonada y un par de gemelos en los puños a juego con el pisa corbata y un chaleco de punto a juego cada uno de un color diferente el suyo con un gris claro y el mio un beige crudo dando así la informalidad formal que la noche exigía en una cena como era la cena del día de Nochebuena,entre los amigos y personas que trabajaban en la casa que hora se habían convertido en nuestra nueva familia ,conjunta con Carlos y Alberto que ellos y nosotros nos habíamos convertido en uno solo .
Una vez vestidos nos dispusimos a bajar hacia el salón que como antes e comentado ya nos esperaban en el los demás,al entra en el mismo estaban Carlos , Alberto , Manuel el padre de Lucia y su Nieto sentados frente a la chimenea tomando algo ,el niño que desde siempre había tenido mucho cariño a Jose Luis al vernos salio corriendo  y se tiro a sus brazos para llevarle a que viese algo que estaba coloreando sobre un papel encima de la mesa ,y como a Jose Luis le encantaba los niños y disfrutaba con sus juegos siendo algo que tenia pendiente y que jamas había descartado sea de la forma que sea el ser padre el disfrutaba del hijo de Lucia como si de el se tratara le había cogido un cariño especial y el niño cada vez que le veía tan solo quería estar con el y compartir su forma de juego ya que el también se daba a ello y disfrutaba con el mismo en su compañía,Mirar que extraño ,Manuel era un hombre de su época con sus rarezas y manías como cualquiera ,bastante culto aunque era analfabeto   y apenas sabia leer y escribir algo que tiempo después Jose Luis se encargo que lo dejara de ser ayudándolo el mismo a que aprendiera a leer y escribir perfectamente,pero lo que yo os quería comentar no era eso si no que se perfectamente que el sabia lo que había entre nosotros y si no lo intuiría como es normal ,pero jamas notamos desprecio alguno ni desconfianza al contrario nos tenia un cariño especial como años después nos aclaro en una conversación que surgió un día y el tema siendo esquivado al final como todo ,salio sin mas remedio ,pero para  nuestra  sorpresa a veces de quien menos nos podamos esperar es de quien mas debemos fiarnos y aprender ,en este caso de Manuel el padre de Lucia ....
Autor..
Crispulo Pallero Diaz ..    

1 comentario:

  1. 227 entrega del relato .EL AMANTE DEL MINISTRO ..ya en el blog y como siempre digo la realidad termina solo cuando empieza la ficción y ese limite solo yo se donde empieza y acaba

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